15.4.10

Me senté y me puse a pensar que la lógica no servía de nada, pasaban las gaviotas de la poesía, porque las gaviotas son poéticas o no son nada, y me imaginé un mar y un cielo, todo escrito, todo cantado. Soñé las noches y los días como círculos, me detuve en la formalidad del sueño, lo busqué con las manos y, al fin, lo atrapé, lo acaricié y durmió sobre mi cuerpo la pequeña gaviota, la herida gaviota.

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo soñé con poesía, musas, montañas, relojes y arena. Busqué en telas y estanques, pregunté a los vientos, te encontré. Una gota murmuró que no eras sino otro sueño, palidecí y me dejé atrapar