Si crees que aún es temprano,
si crees que recién está saliendo el sol,
que lo de ayer fue otro día,
que los encuentros fueron de otro año.

Si crees que todo tiene un comienzo,
en cada minuto, en cada segundo,
en cada canción, en cada sonido,
en cada palabra, en cada perdón.

Si crees que las sábanas respiran,
que todo silencio se quiebra,
si crees que el agua nos une,
que todo es nuevo, que nada es viejo.

Si crees que la fiebre es pasajera,
que los agujeros no existen,
que detrás de cada hueco se encuentra
un espacio en el medio de la nada.

Si crees que hay una sonrisa,
un pétalo de sal, una niña rubia
que sube el monte, un espejo,
una canción de verano.

Si crees en la poesía, en la música,
en las tristezas, en el sueño,
si crees en mi Principito, en mi
cuadro, en mis manos.

Si crees en los héroes, en los mártires,
en las causas justas, en el amor,
en los vencedores, en los vencidos,
si crees en todos ellos.

Si crees en el mundo, en los niños,
en las plazas, en el sol de Villa Luro,
en los barriletes, en que la luna
brilla por sí sola.

Si crees en la vida,
si crees en la vida compartida,
compartida de a dos,
y con el resto del mundo entero.

Si crees en esta unión,
en esta compañía,
crees en mí, creo en vos,
creemos en nosotros.